RECOMENDACIONES DE NUESTRO ORIENTADOR

Estimadas familias:

Tras una primera semana de confinamiento, en cumplimiento del decreto de estado de alarma, por el problema del coronavirus, a algunos niños y niñas y a sus familias es posible que se le empiece a hacer un poco pesaíllo, más aún sabiendo que durará otras dos más. Es por eso que, para evitar que la situación se complique y para hacer el tiempo más llevadero, desde el equipo de orientación del colegio nos gustaría hacerles algunas recomendaciones, agrupadas en distintos bloques:

1. Horarios y tiempos
Es importante establecer rutinas diarias con actividades diferenciadas, con unas normas claras sobre lo que se puede hacer en cada momento del día. Así se hará el día más llevadero, sabiendo qué es lo que se va a hacer a cada hora. Si no se hace así, es más probable la aparición de discusiones sobre qué hacer y qué no hacer, pues que lo haga otro, pues yo quiero ver mis dibujos, pues tú ya has visto unos y ahora me toca a mí elegir, etc. Por lo tanto es necesario hacer un horario:
– Recomendamos intentar mantener los horarios de sueño y comidas, lo más parecidos a los habituales. Empezar el día aseándonos y vistiéndonos, aunque sea con ropa cómoda, pero no quedarnos en pijama. Es importante mantener una actitud activa.
– Mantener contacto con el centro y con las maestras y seguir sus indicaciones.
– Incluir un tiempo de tareas escolares. Estas deberían hacerse por la mañana, igual que cuando estaban en el colegio. Aconsejamos aprovechar la hora de actividades escolares emitidas para cada ciclo en el canal Clan TV, y a continuación (o justo antes) hacer las
tareas que hayan mandado las maestras y maestros.
– Aprovechar la abundancia de tiempo libre para enseñarles a hacer algún tipo de tareas domésticas y que ayuden a ellas. Se puede invitar a los niños a que colaboren a elaborar su comida o su postre favoritos, ayudar a hacer la cama, hacer turnos para poner y quitar la
mesa, enseñar cómo se pone una lavadora, colaborar en la limpieza del suelo (yo aparto los muebles y tú barres –o al revés-). Compartir la realización de este tipo de tareas nos permitirá tener con nuestros hijos e hijas un contacto muy gratificante, que facilitará hablar
con ellos, conocerles mejor y que nos conozcan…
– Procurar que todos los días tengan un tiempo de lectura (a la hora que ellos mismos quieran) cuanto más tiempo mejor. También pueden redactar, escribir un diario del encierro, pintar (sacar las pinturas y que las tengan a mano)…

2. Mantener el equilibrio emocional
– Para esto ayuda mucho realizar bien el punto anterior. Establecer normas sobre rutinas, horarios y obligaciones de cada uno ayudará a mantener el equilibrio mental y a evitar conflictos y discusiones familiares.
– Respetar los espacios comunes. Procurar que el salón, salita o comedor no sea un campo de batalla por intentar hacer cada uno lo que quiera, sino que sea un espacio de convivencia donde se haga lo que digan los padres o se acuerde por consenso.
– Si las condiciones de la vivienda lo permiten, cada uno podrá satisfacer sus propios intereses en su propia habitación, pero procurando que tampoco se esté todo el día en ella. Es necesario compartir tiempos.
– Evitar estar todo el día hablando del tema del coronavirus, ni estar todo el día conectado a noticias, mensajes, etc. Basta con ver unas noticias una vez al día. El resto del tiempo debemos liberar nuestra mente, distraerla y ocuparla en otras cuestiones.
– Aprovechar algún momento del día para compartir actividades lúdicas en familia: parchís, juegos de cartas, o cualquier otro tipo de juegos de mesa, contar cuentos, contar anécdotas de la propia historia personal, chistes, cantar, bailar… en función del carácter de
cada uno.
– Vivir pensando en el día a día, en disfrutarlo lo mejor posible. No pensar en lo que queda todavía.

3. Uso de dispositivos móviles y redes sociales
En estos días, los móviles, el internet y las redes sociales nos pueden servir de distracción, además de permitirnos estar en conexión con aquellos que ahora no podemos ver (amigos, seres queridos, compañeros, profesores… ). Esto también es bueno para los niños y
especialmente para los adolescentes, que así pueden seguir conectados con sus compañeros. Permitirles el uso de móviles u otros dispositivos durante un tiempo diario, al menos para conectarse con los demás.
– Pero hay que tener cuidado con estar demasiadas horas ante una pantalla, y más aún ante una pantalla pequeña, y por supuesto, evitar que los móviles, tablets, etc. interfieran en las horas de sueño. Poner límites horarios y ofrecerle otras alternativas.
– Respecto a la búsqueda de información, no creer todas las noticias que nos lleguen, de fuentes no oficiales, y mucho menos de mensajes de supuestos médicos, transportistas, policías… que en su inmensa mayoría son bulos que inundan la red y que solo contribuyen a generar malestar y desinformación negativa.

4. Ejercicio Físico
Estos días también es necesario continuar haciendo ejercicio. La actividad física ayuda a mantener la salud, la actitud activa, el bienestar corporal y muscular. Pero también es muy importante para mantener el equilibrio emocional, ya que la actividad física nos ayuda “a
fogar”, a generar adrenalina y a eliminar estrés y ansiedad. Hay en internet muchos programas y correos con ejemplos de actividad para casa: bailes, flexiones, saltos, aerobic, que el maestro de Educación Física os puede recomendar.
– Quienes tengan la suerte de tener un patio pueden hacer, además, ejercicio al aire libre, de pelota, cuerda, rayuela, etc.
– Es necesario buscar cada día algún tiempo para realizar ejercicio y mucho mejor si es compartido en familia. Puede ser muy divertido.

5. Gestión de las emociones
En este tiempo, encerrados y en estrecho contacto, a veces discrepancias, pueden aparecer reacciones de frustración, enfado, cabreo, rabietas… Es necesaria mucha comprensión, fomentar la escucha y la comunicación, en confianza. Aunque no se debe consentir que
se pierdan las formas, es necesario intentar corregir con serenidad y amabilidad aunque no se pierda la firmeza. Es necesario demostrar comprensión y empatía explicándoles que nos sentimos igual que ellos, con angustia, con ganas de salir, con inquietud… pero también tranquilizándolos, explicándoles que “nosotros estamos bien”, tenemos que estar tranquilos, si hacemos caso todo se pasará antes y todo será más agradable…

Finalmente, solo me queda desear que estas recomendaciones les sean de utilidad para pasar estos días de forma más tranquila y agradable. Igualmente, aprovecho para quedar a su disposición. Si alguien desea o necesita contactar conmigo puede hacerlo comunicándoselo a su tutor o tutora o a la dirección del centro, dejando un teléfono de contacto. Desde aquí se me comunicará vuestro recado y a la mayor brevedad me pondré en contacto con ustedes. En ese caso les advierto que mi teléfono de trabajo emite un número oculto, por lo que en caso de recibir una llamada con número oculto es muy posible que sea la mía.

Solo queda recordar una última recomendación: Para que todo pase antes, no olvidar “Yo me quedo en casa”.
Les envío un cordial saludo.

En Atarfe, a 23 de marzo de 2020.
Manuel López Bermúdez
EOE de Atarfe.

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